Hay algo mágico acerca de la naturaleza y sus fenómenos. La gente siempre tenían miedo de ellos. Es por eso que pagamos respecto a los relámpagos y truenos y eventos similares. Las mismas cuentas del paisaje desconocido pero espectacular del universo. Hace miles de años que sentimos el vínculo más fuerte nunca con la naturaleza. Adorábamos ella. Ahora lo destruimos.