Aunque parezca mentira, existen multitud de hombres que todavía no han aprendido a hacerse el nudo de la corbata y tienen que acudir a su padre o a su mujer cada vez que lo necesitan. No será más fácil aprender chicos? Sí, es cierto que vivimos en una época donde el código de vestimenta se ha relajado y donde hay viernes casuales hasta en las oficinas más serias.