¡Felicidades! Lo hiciste. Esos largos meses de embarazo están detrás de ti y has dado la bienvenida a tu pequeño al mundo. Incluso con el trabajo y el parto más rutinarios, es posible que aún se sienta agotado, dolorido, emocionado y abrumado. Cada futura madre quiere ser una buena madre.